La noticia la dio a conocer uno de los antiguos socios mayoritarios a Radio Guatapurí de Valledupar en el programa Punto de Vista. Así registró el portal de noticias de nuestro medio aliado la información:
Consternados y sorprendidos quedaron los socios minoritarios del Valledupar Fútbol Club S.A. al recibir una citación a una reunión extraordinaria de su junta directiva con el fin de discutir y decidir sobre un posible cambio de sede del equipo.
En efecto, a través de sus correos electrónicos recibieron la citación firmada por el representante legal del equipo, Nicolás Baena Fernández de Soto, a una reunión el próximo jueves 22 de junio, a las doce del mediodía, con el fin de discutir como punto central el “traslado de la sede deportiva”.
Pero no solo perplejos quedaron los accionistas del Club, la prensa deportiva y los miles de aficionados del equipo han quedado en shock ante una noticia que sepulta en un santiamén más de dos décadas de trabajo continuo para que Valledupar tuviese fútbol profesional.
Cabe recordar que en el segundo semestre del año pasado, la participación mayoritaria del equipo fue vendido por un grupo de inversionistas locales a la empresa Societa Sportiva NBS, controlada por los señores Luis Alfredo Baena (padre) y Nicolás Baena (hijo).
Radio Guatapurí dialogó con el expresidente del Club, José Antonio Larrazábal, quien confirmó la noticia y expresó su desazón por esta decisión. Larrazábal indicó que “cuando se firmó el acuerdo de venta de la participación mayoritaria se dejó establecido que el nuevo socio se comprometía a mantener una permanencia mínima del equipo en la ciudad de tres años que aún no han transcurrido, luego hay que analizar con cuidado en dicha reunión cuáles son las razones que expone para proponer el cambio de sede”.
De otra parte, el exdirectivo indicó que extraoficialmente se ha conocido que el accionista mayoritario alega la falta de apoyo local, precisando que ni la gobernación del Cesar, ni la alcaldía ni el sector privado han asignado recursos para el sostenimiento del equipo, práctica que es usual y consuetudinaria en el resto de ciudades del país que tienen equipos en el fútbol profesional.
Finalmente, Larrazábal señaló que lo que más le preocupa es que todo estaría cocinado para llevarse el equipo para otra ciudad, porque ya en la DIMAYOR, que es el máximo ente rector del fútbol profesional colombiano, se habría hecho la solicitud para que se autorice el cambio de sede.
De materializarse esta nefasta noticia, se perdería en gran medida todo el esfuerzo de formar nuevos jugadores en la cantera del Valledupar Fútbol Club, desde las divisiones inferiores hasta la alineación titular del equipo que juega en la Primera B. Y de otra parte, el remodelado estadio Armando Maestre quedaría sin oficio, prácticamente subutilizado porque un estadio sin fútbol es tan triste como una parranda sin un acordeón.